Investigadores de la UNQ crean un estetoscopio de simulación virtual
Investigadores de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) desarrollan tecnologías educativas para el aprendizaje en la carrera de Enfermería. Así, crearon un estetoscopio digital que permite realizar las prácticas a través de muñecos y pieles ficticias, con sonidos que se asemejan a los cardíacos y respiratorios. Además, elaboraron un programa para realizar electrocardiogramas con realidad aumentada y otro para hacer cateterismos de forma virtual. El fin es reducir al máximo el margen de error y llegar con los saberes consolidados a la hora de hacerlo con personas de carne y hueso.
Aunque la idea ya rondaba en la cabeza de sus impulsores, la pandemia aceleró los tiempos y la necesidad de dar respuestas a las nuevas problemáticas. En este sentido, el propósito es producir la mayor cantidad de equipos (que podrían reducir a un décimo el valor de los equipos importados) y que el resto de las universidades que enseñan la carrera puedan acceder a ellos.
“La pandemia fue un punto de quiebre en la formación de enfermeros y enfermeras porque produjo una ruptura en el tiempo y el espacio pedagógico. No teníamos ni espacios ni materiales para realizar las prácticas que estaban pensadas para la presencialidad y tuvimos que adaptarnos en quince días”, recuerda Karina Espíndola, directora de la Licenciatura en Enfermería de la UNQ.
A partir del contexto impuesto por la covid, la carrera debió transformarse y pensar en pedagogías mediadas por las nuevas tecnologías y la incorporación de dispositivos virtuales para la enseñanza. Con financiamiento otorgado por la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, diseñaron artefactos interactivos de simulación para pensar nuevas estrategias que fortalezcan los aprendizajes de los estudiantes.
“Creemos que el acercamiento previo de las y los alumnos a algunos procedimientos a través de estos materiales que pueden ver desde un celular (como en el caso del programa para aprender a realizar cateterismos) antes de llegar a la práctica real suma un plus. Además, ayuda a los docentes a poder transmitir mucho mejor estos conceptos que después realizan de manera concreta y en contexto real”, señala Marina Gergich, coordinadora de materiales didácticos de la Subsecretaría de Educación Virtual y Bimodalidad de la UNQ.