La iniciativa fue tratada en sesión ordinaria y se enmarca en una declaración más amplia, por la cual se designó al año en curso como un homenaje a la memoria y el legado del Papa Francisco. Desde el cuerpo legislativo destacaron su rol como líder religioso global y su constante llamado a la paz, la justicia social y el cuidado de los más humildes.

Con este gesto simbólico, Quilmes se suma a las múltiples expresiones de reconocimiento que ha recibido el Papa en distintas ciudades del mundo.